La Dra. Paula Sánchez nos explica todo sobre los soplos cardiacos y sus síntomas.

Un soplo es el sonido que hace la sangre al circular de manera turbulenta a través de las válvulas del corazón para pasar entre dos cámaras cardiacas diferentes. En ausencia de enfermedad cardiaca la sangre no debería emitir ningún ruido al pasar por estas válvulas.

¿Qué tipos existen?

Existen soplos fisiológicos (aquellos que no tienen repercusión en la salud) que son comunes en niños y en algunos adolescentes, especialmente durante el ejercicio o en procesos febriles.

También existen soplos que ponen de manifiesto una posible alteración anatómica de las válvulas del corazón, bien por incapacidad de cerrar bien sus velos (insuficiencia valvular) o bien por estar estrechado el orificio valvular (estenosis valvular). También pueden existir soplos ante la presencia de una comunicación entre diferentes cavidades, alteraciones del miocardio cardiaco o infección de la válvula (denominada endocarditis). 

Durante la auscultación cardiaca podemos sospechar ante qué tipo de soplo nos encontramos, ya que se evalúa su localización, duración, intensidad, e irradiación; además se valora la presencia frémito durante la palpación del tórax. Sin embargo, la realización de un ecocardiograma transtorácico nos aporta mucha información para el diagnóstico final y la estratificación de la severidad.

¿Qué síntomas deben alarmarnos?

Siempre es importante asociar la presencia de un soplo cardiaco con la sintomatología del paciente. La presencia de mareo o pérdida del conocimiento, disnea o sensación de falta de aire, limitación de la capacidad funcional, edematización de miembros inferiores o la intolerancia al decúbito supino pueden ser indicaciones de una patología cardiaca o valvular avanzada. 

¿Pueden desembocar en patologías más graves?

Los soplos fisiológicos, también denominados inocentes, no producen clínica y no evolucionan a una patología grave, desapareciendo conforme el niño crece. Para poder denominarlo soplo fisiológico, deben haberse excluido enfermedad cardiaca. 

Sin embargo, los soplos debidos a una afectación valvular cardiaca precisan de un diagnóstico correcto, un seguimiento médico y en algunas ocasiones un tratamiento corrector, que puede abarcar desde un tratamiento médico hasta un tratamiento quirúrgico.