La extrasistolia es una alteración del ritmo del corazón. Se trata de un latido adelantado que proviene de un foco diferente al nodo sinusal (que es el que genera los latidos normales del corazón). Pueden ser de origen supraventricular (en las aurículas) o ventricular.  

Las extrasístoles auriculares (originadas en las cavidades superiores del corazón), son latidos cardíacos adicionales que pueden presentarse en personas con corazón normal. Es un tipo de arritmia muy común, que suele presentarse en personas jóvenes y sanas. Se origina de forma espontánea en las aurículas antes de un latido normal y no supone ningún peligro. 

Las extrasístoles ventriculares (originadas en las cavidades inferiores del corazón), son también arritmias muy frecuentes y aparecen en pacientes con y sin enfermedades del corazón.

La mayoría de extrasístoles son asintomáticas y pasan inadvertidas. También pueden causar palpitaciones o sensación de “vuelco al corazón”. Para su diagnóstico se utiliza el electrocardiograma y el Holter ECG de 24 h. Siempre hay que descartar que el paciente tenga alguna enfermedad cardiaca de base. 

Muchas veces están relacionadas con situaciones de mayor estrés emocional y favorecida por el abuso de sustancias como el café, el té, el tabaco y el alcohol, por lo que el primer paso para intentar que cedan es el cambio en estilo de vida, suprimiendo a disminuyendo estas situaciones.

Se clasifican según su frecuencia en poco frecuentes (menos de 10 /hora), frecuentes (entre 30 a 60/hora) y muy frecuentes (más de 60/hora). 

Si las extrasístoles se presentan en un porcentaje mayor al 10-15% de todos los latidos cardiacos, pueden causar una forma reversible de miocardiopatía y deteriorar la función de bomba del corazón.

Por lo general, no se requiere tratamiento a excepción de ser muy sintomáticas o presentarse en un porcentaje muy elevado, en este caso, normalmente se utilizan fármacos como los betabloqueantes para su tratamiento. En casos raros con un porcentaje de extrasistolia muy elevado a pesar de fármacos se puede realizar una ablación con catéter para intentar suprimir el foco que los produce.