¿Qué consecuencias puede tener haber pasado el coronavirus para un enfermo cardiovascular?
Los pacientes con enfermedad cardiovascular previa son de alto riesgo para infección por COVID19 ya que en estos pacientes la infección puede agravar su enfermedad cardiovascular y más si se trata de pacientes con insuficiencia cardiaca que tienen la función del corazon disminuida. En estos casos la infección puede producir una descompensación de su insuficiencia cardiaca y precisar ajuste de tratamiento.
En principio no se está observando que la infección por COVID19 deje secuelas importantes a nivel cardiovascular, salvo en los casos en los que produce miocarditis (que la infección afecte al musculo del corazón). Como ya comentamos en el blog, en los pacientes que tiene afectación del miocardio por el virus puede existir deterioro de la función miocardica y precisarán un tratamiento específico y mayor vigilancia.
Los pacientes con enfermedad cardiovascular previa son de alto riesgo para infección por COVID19 ya que en estos pacientes la infección puede agravar su enfermedad cardiovascular y más si se trata de pacientes con insuficiencia cardiaca que tienen la función del corazon disminuida. En estos casos la infección puede producir una descompensación de su insuficiencia cardiaca y precisar ajuste de tratamiento.
En principio no se está observando que la infección por COVID19 deje secuelas importantes a nivel cardiovascular, salvo en los casos en los que produce miocarditis (que la infección afecte al musculo del corazón). Como ya comentamos en el blog, en los pacientes que tiene afectación del miocardio por el virus puede existir deterioro de la función miocardica y precisarán un tratamiento específico y mayor vigilancia.
¿Es recomendable someterse a un chequeo para estos pacientes?
Una vez resuelta por completo la infección por COVID19 es importante retomar las revisiones médicas y realizar un chequeo para valorar la situación cardiológica actual y realizar los ajustes en el tratamiento que sean precisos.
¿Qué pruebas se realizan?
Un electrocardiograma, una analitica y un control de presión arterial, son las pruebas básicas en una revisión cardiológica. Se deben completar siempre que sea posible con un ecocardiograma (ecografía del corazón) para valorar si existe cardiopatía estructural o si la que ya existía ha progresado.